Conversacion etilica con un adolescente.

Frente a ti esta el mundo, la vida, el destino o cualquier nombre que te sugestione mas. Y se te propone en dos vias: Impuesto o sugerido. Cual tomas?
Pensemos que se es rebelde. Lo impuesto no es opcion. Entonces tomas lo sugerido, porque hay que tomar algo, como en las barras libres cuando adolescente, no hay opcion, la inactividad es la cobardia imperdonable, la ultima traicion. Ademas se entiende que la sugerencia se toma o se deja, no?. Pero cuando es la ultima opcion, se convierte en la imposicion agazapada, el señuelo perfecto para el rebelde. La libertad sugerida, es una cadena forrada de terciopelo.
Ahora, rebelarse contra la rebeldia, por estupida, por hacernos perder el tiempo, por extraviarnos en lugares donde no nos encontramos anyway. Y habernos dejado en el otro lado, solamente para ver, que ahi tampoco habia nada.
Y los cobardes, los traicioneros? Los inactivos. La cobardia y la Traicion son conceptos que se mastican mucho en la adolescencia. Y como la mayoria de las cosas en esa suave edad; ardiente de estrellarse, se malinterpretan. Hay quienes encontraron el paraiso en la inactividad, y estan felices, y alcanzaron generalmente, mas exito, que los que tomaron sus oportunidades. Se les ve bien, yo reconozco su inteligencia, su vision. Pero cuando no se es inactivo, no hay nada que hacerle. Entonces re-pensemos la rebeldia, las vias por las que nos arrojan al mundo.

Tomemos lo impuesto.
Entonces, dentro del juego, hagamos sutilmente el nuestro.